El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos ha caído por un proverbial abismo en los últimos meses. Sin embargo, el Dow Jones Industrial Average (DJIA) ha experimentado una recuperación y ahora un crecimiento.
Esta divergencia ha dejado perplejos a los inversores. Si la producción en la economía de los Estados Unidos ha disminuido, ¿Por qué han aumentado los valores de las acciones que representan esa economía?
Una posible respuesta ofrecida por el analista técnico Tom McClellan es que existe un desfase entre la caída del PIB y la posterior caída del mercado.
El dólar estadounidense “encadenado” muestra que existe un retraso
El análisis de McClellan comienza encadenando el dólar a su valoración de 2012. El término “encadenado” representa una forma sencilla de calcular cambios de valor que no se ven afectados por la inflación.
Al analizar las caídas anteriores del PIB, el gráfico indica que el mercado de valores tiende a responder a los cambios del PIB después de un breve pero notable retraso. Es probable que el retraso sea el resultado de que los inversores comprendan el impacto de las caídas y luego respondan negativamente.
Curiosamente, el gráfico también revela que la disminución actual del PIB es mucho más sustancial que las anteriores.
La crisis de valores respaldados por hipotecas de 2008 provocó una caída del PIB del 5%. Sin embargo, la crisis actual, impulsada principalmente por la pandemia de COVID-19, ya ha provocado una disminución de casi el 10%.
El mercado de valores se mantiene en niveles altos y otros vehículos de inversión como la vivienda son fuertes. Sin embargo, el gráfico indica que la economía eventualmente responderá, y si los eventos previos son predictores, la caída será sustancial.
¿Bitcoin se mantiene estable con relación a las acciones y el oro?
Bitcoin se había acoplado anteriormente con el mercado de valores, subiendo y bajando según la actividad de inversión. Sin embargo, durante la crisis de COVID-19, la principal criptomoneda se ha desplazado y ahora se combina principalmente con el oro.
Si bien el oro y otras reservas de activos de valor se han mantenido relativamente fuertes, se han retirado ligeramente de los máximos recientes, y lo mismo se ha visto para Bitcoin. Si las acciones comienzan a hundirse a medida que se cierra el tiempo de espera, el miedo podría llevar a los inversores a volver a los metales preciosos y las criptomonedas.
