Si los eventos recientes son un indicador, la carrera por las monedas digitales de los bancos centrales (CBDC) parece estar al rojo vivo.
En agosto, se anunciaron pruebas del piloto de pago electrónico en moneda digital de China en 27 ciudades de todo el país. También hubo informes de que algunos de los principales bancos comerciales estatales de China ya habían comenzado a realizar pruebas internas a gran escala de wallets digitales casi al mismo tiempo.
Ventajas de hacer el primer movimiento
SponsoredReportado por Reuters el 21 de septiembre, el artículo argumentó que Beijing debería “acelerar el ritmo [de desarrollo] para tomar la vanguardia” en la carrera global para emitir monedas digitales fiduciarias. También se refirió a la competencia para emitir y controlar una moneda digital como un “nuevo campo de batalla” entre países soberanos.
Según este comentario, es importante que China gane esta carrera para “internacionalizar el yuan y reducir su dependencia del sistema global de pagos en dólares”.
El artículo también señaló que una unidad de investigación de moneda digital del PBOC (Banco Popular de China, en español) ya ha presentado 130 solicitudes de patente relacionadas con la criptomoneda. Además, se han presentado numerosos informes que indican que los importadores de mineral de hierro de China están interesados en abandonar el dólar estadounidense y cambiar al nuevo yuan chino digital.
La carrera por la CBDC
El tema del dólar digital está recibiendo una mayor atención a medida que China parece estar cerca de la línea de meta. En la carrera por la supremacía de CBDC, los expertos de Bank of America reconocieron que China estaba significativamente por delante de Estados Unidos en junio.
De hecho, el Banco Popular de China anunció el 21 de septiembre a través de su medio de comunicación oficial que, en términos de un lanzamiento de CBDC, “se han completado todos los preparativos”. El mismo artículo también indicó que se habían “cumplido” las condiciones para el despliegue.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, quien, tan recientemente como en 2019, decía que el banco central de Estados Unidos “no había identificado posibles beneficios materiales”, ha adoptado una postura más urgente. A principios del verano, le dijo al Congreso: “estamos trabajando duro en ello. Tenemos muchos proyectos, muchos esfuerzos en este momento ”.
